POSICIÓN DE TIRO - Ramón Rodríguez

Dentro del panorama literario actual, muchas veces tenemos la sensación de que «todo está escrito» y que «nada nos va a sorprender». Pues bien, llega Ramón Rodríguez (Luanco, 1976) con su nueva novela y nos demuestra que no, que todavía queda mucho por escribir para sorprendernos y entretenernos. Posición de tiro lo consigue con una historia en la que nos meteremos en el pellejo de un asesino a sueldo y viviremos cómo se las arregla para llevar a cabo su último encargo.

EL DÍA A DÍA DE UN ASESINO, ¿INTERESANTE?

Esta es la propuesta del autor: que conozcamos de primera mano cómo es el día a día de un sicario. Nuestro protagonista tiene una vida, es padre separado y trabaja de camarero en un restaurante. Un tipo de lo más común si no fuera porque también se dedica a realizar ciertos «encargos». Asimismo, veremos su faceta más personal y conoceremos sus manías con ciertas cosas, lo cual hace de él un personaje peculiar.

La novela gira alrededor del último trabajo de nuestro protagonista. La trama transcurre en apenas un mes, desde el inicio del encargo hasta el momento de su ejecución. Veremos cómo se prepara para realizarlo de la mejor manera posible. ¿Cuál es el lugar idóneo para llevarlo a cabo? ¿Cuáles son las costumbres de la víctima? ¿Qué puede salir mal? Nuestro asesino a sueldo no puede fallar y debe controlar todas las variables para que nada estropee su plan.

Sin embargo, una inesperada chica se entrometerá en su cometido y no tendrá más remedio que improvisar, cosa que no le gusta para nada. ¿Cómo acabará todo?

De entrada, puede parecer que el día a día, hora a hora de un sicario sea aburrido. ¿Aburrido? Pues, ¡para nada! Con leer el primer capítulo ya nos daremos cuenta de lo interesante que llega a ser. El lector estará muy entretenido al saber la cantidad de cosas que se tienen que controlar para llevar a cabo la acción.

UNA LECTURA QUE NOS HARÁ PENSAR

Todos andamos ajetreados con nuestra vida, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, no paramos. Cada uno de nosotros tiene su rutina y su forma de vivir el día a día. Con la lectura de Posición de tiro, nos hacemos una pregunta: ¿somos conscientes de que, a la mínima que alguien se ponga a vigilarnos, puede llegar a saber muchas cosas de nosotros? Tampoco hace falta que entremos en pánico, pero si alguien se dedicara a estudiar nuestros comportamientos, lo tendríamos jodido.

Esto forma parte de la preparación de nuestro protagonista, estudiar a las personas, y a mí me ha hecho pensar…

POSICIÓN DE TIRO

Ramón Rodríguez ha conseguido crear una muy buena historia. Gracias a los capítulos cortos y en forma de diario personal (cuyos títulos son el día en que suceden los hechos narrados), el autor consigue que el lector no pierda el interés en ningún momento. Sus 262 páginas se encuentran llenas de tensión e intriga y pasarán por delante de nuestros ojos a gran velocidad, sin olvidarnos de las pequeñas dosis de humor que el escritor va sembrando por toda la narración. Nos zamparemos el libro en dos bocados, literalmente.

Aunque sea un criminal, Rodríguez dota al protagonista de un gran carisma y hace que empaticemos con él desde el primer momento. En muchos puntos de la lectura no haremos otra cosa que cruzar los dedos para que todo le salga bien.

El trabajo de un asesino a sueldo no es solo apuntar y disparar. Antes de hacerlo hay que saber analizar, y esto el autor es capaz de narrarlo de una forma magistral.

Con Posición de tiro no nos aburriremos y pasaremos un agradable rato de lectura de la mano de un auténtico sicario. ¿Será capaz de realizar el tiro?

 

Jose Núñez

Título: Posición de tiro
Autor: Ramón Rodríguez
Páginas: 268
Fecha de publicación: abril 2020

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